Planes - Parte I

“Muchos pensamientos hay en el corazón del hombre; Mas el consejo de Jehová permanecerá.” Proverbios 19:21

Ignora que su existencia es comparada (a más de la neblina) con la hierba del campo y su gloria, comparada con la flor de la hierba que se marchita y muere. 

“Porque: Toda carne es como hierba, Y toda la gloria del hombre como flor de la hierba. La hierba se seca, y la flor se cae.” 1ª Pedro 1:24 

Penosamente ignora el poco tiempo que posee en su transcurso por esta vida y hace planes tan soberbios, no dando a Dios el lugar que le pertenece en su corazón.

Toda persona debería considerar seriamente estas advertencias mostradas en las Escrituras y cambiar de actitud buscando primeramente a Dios y Su voluntad para el transcurso de la vida aquí y para la eternidad que le espera ¿Ha hecho usted planes con Dios para la eternidad que le aguarda? ¿Está Dios incluido en sus planes en primer lugar?

El hombre de la parábola de Lucas 12:16-21 pensaba orgullosamente como si él tuviese bajo su control la lluvia; el tiempo, la fertilidad del suelo, el viento y todo lo que pudiese aportar para una buena y abundante cosecha. Pero aunque presumía tener el control de todas las cosas para su bien estar, no tuvo en cuenta que él mismo no poseía el control de la vida y que esa misma noche llegaría su fin. Por tanto, examinando Dios mismo la actitud de sus pensamientos, lo llama “necio”. Un hombre inteligente; previsor; trabajador; próspero y exitoso según el concepto del mundo, pero Dios lo llama “necio” por presumir tener el poder sobre todas las cosas y principalmente por no incluir a Dios en sus planes. Todos sus éxitos y prosperidades fueron vanos, fue rico según el mundo, pero no fue rico para una eternidad con Dios.

El hombre hace planes, pero finalmente son los designios de Dios los que van a prevalecer. “Muchos designios se hallan en el corazón del hombre; mas el propósito de Jehová es el que se cumplirá.” [VM]. Usted podrá idear planes excelentes y bien calculados. Podrá, inclusive, llevarlos a cabo con aparente éxito y augurios de felicidad, pero si tales proyectos no están conformados a la voluntad que Dios expresa en SU Palabra, no tendrán Su aprobación ni Su bendición, ya que estos proyectos (a más de no incluir a Él) contienen un carácter orgulloso el cual es a su vez, el principio de toda caída y ruina del hombre.

Es por esto que Dios tiene que intervenir, porque el hombre con toda su capacidad humana, siempre toma los caminos equivocados que lo conducen a una destrucción y la realidad de nuestros días lo confirma. “El corazón del hombre piensa su camino; Mas Jehová endereza sus pasos.” Proverbios 16:9 Alejado e independiente de Dios el hombre es incapaz de escoger el buen camino, es entonces que Dios tiene que enderezar; corregir sus pasos o la dirección de su vida.

Reconozcamos entonces humildemente Su autoridad y la autoridad de Su Palabra en nuestro corazón, y permitamos a Él entrar en nuestros planes para que tengamos su aprobación y Sus bendiciones. No hay nada mejor que apoyarnos en SU dirección sabia y Su amor, confiando en que no nos llevarán por caminos equivocados que conducen a la ruina o a la incertidumbre, sino por caminos que conducen a la salvación y a la paz.Cuántas ideas, pensamientos y planes sorprendentes se elaboran en la mente del ser humano! Y no podemos negar que muchos de estos proyectos han sido y son provechosos al ser aplicados para el bien común.

Lo negativo de todo esto es que muchos de estos proyectos del hombre son jactanciosos, por la sencilla razón de que Dios no está incluido en dichos planes; y por consiguiente, no le honran a Él. No le dan el lugar que le corresponde como el Soberano Señor de toda criatura.

Así el hombre lleva adelante sus planes orgullosos, felicitándose a sí mismo, pero en medio de toda esta jactancia, él olvida que su vida es tan pasajera como la neblina. "¡Vamos ahora! los que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año, y traficaremos, y ganaremos; cuando no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece.”  Santiago 4:13-14  Hace planes como si nunca fuese a desvanecerse; orgullosamente dice: “negociaremos y ganaremos.” Cosas que en sí mismas no son malas. Lo malo es que él asegura, orgullosamente, que todo resultará según los cálculos hechos, no teniendo él el poder del mañana ni el conocimiento de lo que será mañana, porque su futuro es incierto.